Impulsamos proyectos sostenibles con tecnología

Se llama "proyecto sostenible" a toda aquella iniciativa que tiene como objetivo la integridad y el respeto al medio ambiente, la equidad social y la prosperidad económica.

El concepto de sostenibilidad está vinculado con la búsqueda constante de la satisfación de las necesidades de las generaciones actuales sin comprometer las generaciones futuras. Por tanto, un desarrollo de un proyecto sostenible tiene siempre presente la sostenibillidad y sustentabilidad pretendiendo conseguir una mejora en el entorno y el bienestar social sin poner en riesgo la supervivencia de las generaciones futuras y del planeta en sí.

• Sostenibilidad ambiental: los desarrollos de proyectos de sostenibilidad ambiental se centran en preservar la biodiversidad sin renunciar a la prosperidad económica y social. Este valor del que parten este tipo de iniciativas hace que puedan mantener los aspectos biológicos a lo largo de su cadena productiva, priorizando siempre las opciones que preservan los recursos naturales y por tanto, fomentando una responsabilidad consciente hacia lo ecológico.
  
  Algunas de las bases que moviliza la sostenibilidad ambiental son: el cuidado del agua, el ahorro de energía, la redución de residuos, el uso de envases reciclabes, la eliminación del uso de plástico, el cuidado del entorno...
  
  En la actualidad, muchas empresas han comenzado a implantar la conciencia de la sostenibilidad ambiental dentro de sus procesos.
  
  
• Sostenibilidad económica: En los desarrollos de proyectos de sosteniblidad económica se busca que la sosteniblidad ambiental y social sean rentables. En otras palabras, intenta que satisfacer las necesidades del ser humano no ponga en riesgo la conservación del medio ambiente ni sacrifique la calidad de vida de las generaciones futuras.
  
  
• Sostenibilidad social: Un proyecto de sostenibilidad social tiene como eje de su desarrollo fortalecer la cohesión y la estabilidad de grupos sociales concretos. Este tipo de proyectos se caracterizan por promover valores que generen movilización por ejemplo, el respecto por la naturaleza, la dignificación de la eduación, la vivienda...
  
  

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son el eje y la base que sustenta la Agenda 2030 a través de una mirada integral, indivisible y que llama a la colaboración internacional para construir el futuro que queremos.

Los ODS abarcan 17 áreas o ámbitos de actuación, 169 metas y 231 indicadores. Funcionan como herramienta de planificación y seguimiento para los países, no solo a nivel nacional, sino también local. La intención de los objetivos de desarrollo sostenible es asegurar que caminamos hacia un futuro sustentable, inclusivo y en armonía con el medio ambiente.

• 1. Fin de la pobreza
• 2. Hambre cero
• 3. Salud y bienestar
• 4. Educación de calidad
• 5. Igualdad de género
• 6. Agua limpia y saneamiento
• 7. Energía accesible y no contaminante
• 8. Trabajo decente y crecimiento económico
• 9. Industria, innnovacion e infraestructura
• 10. Reducción de las desigualdades
• 11. Ciudades y comunidades sostenibles
• 12. Producción y consumo responsables
• 13. Acción por el clima
• 14. Vida submarina
• 15. Vida de ecosistemas terrestres
• 16. Paz, justicia e instituciones sólidas
• 17. Alianzas para lograr los objetivos

• Reducción de la huella tecnológica: Es innegable que con la evolución de la tecnología también ha aumentado la cantidad de energía que consumimos en el desarrollo de nuestros proyectos. No obstante, la tecnología también ofrece soluciones con las que beneficiarnos de estos avances a la vez que optimizamos y reducimos nuestra huella de carbono como por ejemplo: la computación en la nube, la robótica, los sistemas de construcción inteligente, la domótica...



• Amplificación del impacto positivo: Si gracias a la tecnología se ven favorecidos proyectos que perjudican el bienestar social y medioamental, ¿por qué no aprovechar para llevar al mundo digital iniciativas que reducen el impacto negativo que dejamos? En la mayoría de los casos, esto no solo permite la viabilidad del proyecto sino que aumenta considerablemente el alcance y, por tanto, la huella que deja.



• Medición de la sostenibilidad: Las métricas ESG (ambientales, sociales y corporativas) no solo están vinculadas al nivel de cumplimiento o compromiso, sino también a cómo desempeñamos nuestra actividad. La tecnología permite crear indicadores clave de rendimiento con los que obtener datos relevantes para crear, seguir y gestionar nuestro valor de sostenibilidad.
  
  Lo que medimos, nos ayuda a definir lo que somos. El acceso a los datos nos ayuda a tomar mejores decisiones en cualquier nivel empresarial. En este sentido, podemos apoyar nuestro compromiso de sostenibilidad en el despliege inteligente de tecnologías existentes y emergentes.



• Creación de cadenas de valor de sostenibles: Para que un proyecto cumpla con las expectativas del público al que va dirijido y sea verdaderamente sostenible, debe garantizar prácticas responsables en toda su cadena de valor. Esto solo es posible si consigue asegurarse de que sus diseños, almacenes, proveedores, subcontratistas etc, cumplen con las más altas exigencias de responsabilidad ambiental y social.
  
  En el diseño de una cadena de valor transparente podemos servirnos de herramientas de blockchain.